Dicen del Órbigo que no tiene fuente de origen ni madre que lo bautice. Esto no es del todo cierto, porque es hijo de dos grandes ríos que bajan de la montaña y que al llegar a la llanura se transforman en uno solo. Normalmente se conservaría el nombre del más largo o caudaloso; sin enbargo, ya desde época prerromana se le dio un nombre nuevo: orbi-cua, que significa unión o confluencia de dos aguas.
El Omaña y el Luna han recorrido ya muchos kilómetros cuando llegan a su matrimonio. El primero baja salvaje y caudaloso; el Luna no lo es menos, pero está muy controlado por un embalse y su correspondiente contraembalse. A partir de esa confluencia el Órbigo recorrerá más de setenta kilómetros hasta Zamora, y todavía le quedarán unos cuantos más antes de unirse al Padre Esla.
Datos técnicos:
ISBN 978-84-96872-12-7 (León 2009)
LIBRO:
Texto.- Teresa García Montes y Ricardo Chao Prieto
Fotografía.- Puri Lozano y Miguel Sánchez
VIDEO:
Texto.-Teresa García montes y Ricardo Chao Prieto
Imagen.- Valentín Costo y Alberto Alba Lago